Viejos límites para nuevos modos

A estas alturas la mayoría de la gente interesada en los temas sociales habrá recibido el famoso mail o se habrá enterado por otra vía del vídeo realizado por Amnistía Internacional. Pero no es del vídeo en si sobre lo que me gustaría hablar, si no de la polémica, o mejor todavía de la no-polémica. Porque así como ayer decía que estaba asustado hoy he encontrado motivos para ser optimista. Lo que podía haberse convertido en un estúpido «o estás conmigo o estás contra mi» ha sido tratado de forma seria en los blogs que sigo con asiduidad. Así, Olga, laotraagenda e Iván Pino hablan de ello sin estridencias ni creerse poseedores de la verdad absoluta, lo cual es realmente de agradecer.

Personalmente, y sin referirme a este caso en concreto estoy más en la línea de Iván cuando dice:

La comunicación se construye sobre la confianza. Si deseamos que esta aventura de la Comunicación 2.0 termine cuajando, no deberíamos desvirtuarla con medias verdades ni ficciones de película. Así, sólo lograremos cargarnos la credibilidad del medio y del emisor. Sin remedio.

En otras palabras, no permitamos que la Publicidad cortoplacista y efectista reviente la oportunidad que supone la Web Social para el desarrollo del Tercer Sector

Y porque uno de los argumentos que se da desde laotraagenda:

Sobre si AI aprovecha esas «resistencias» o excusas del Gobierno para conseguir mayor difusión… Seguramente. Y bien por ellos: máximo impacto con pocos recursos. Jugada redonda por una buena causa. ¿No?

no es válido para la generalidad de los casos (aunque lo sea para este) como en otra ocasión se explico desde ese mismo blog.

De todas formas ambas opiniones me llevan a pensar en algo distinto. Creo que existen dos problemas de fondo. Por un lado estamos empleando un montón de nuevos términos a los que no todos aplicamos el mismo significado. Tomemos el caso del término ciberactivismo. Está claro que el uso de él que hace Greenpeace no tiene nada que ver con el que por ejemplo emplea David de Ugarte.

El otro problema estaría en una vez llegado a un acuerdo sobre el concepto que representa cada término habría que ver como se relacionan con las estrategias actuales del tercer sector (incidencia o cabildeo, sensibilización y educación para el desarrollo

Es decir, serían el ciber-algo y la cosa 2.0 nuevas estrategias o más bien tácticas dentro de las estrategias conocidas. Si se puede integrar en sus acciones habituales el cambio de mentalidad en las ONG no debería ser tan complicado y los límites de lo ético ya están interiorizados. Si en cambio lo pensamos como algo totalmente nuevo tenemos que repensar donde están los límites entre la originalidad y la desfachatez. Por ejemplo, el vídeo del robo del escaño a Zapatero fue algo original o contraproducente.

Nota: Reconozco que no estoy seguro de haber empleado estrategia y táctica en sus sentidos correctos.

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